Si bien hasta el 2006, OIKOS no consideraba a la minería entre las 10 amenazas ambientales en Mendoza (
UNO – 25/09/2006 -
AVINA.NET), ya estaban anticipando su posición en agosto del 2004, con el yacimiento de oro La Cabeza (actual Don Sixto) en Malargüe (
Los Andes – 24/08/2004), se hacen presentes en el nacimiento de la oposición a Sierra Pintada en el 2004 (
Los Andes – 19/07/2004) y en octubre del 2006 en contra del proyecto Potasio Río Colorado (
Los Andes – 01/10/2006). En cuanto a San Jorge, el primer registro del interés de OIKOS data de julio del 2009 (
Los Andes – 28/07/2009), interés que se ha incrementado, hasta desarrollar una estrategia judicial con presentaciones ante el fuero penal, contra la empresa por falsedad ideológica y contra los funcionarios del Ejecutivo por incumplimiento de la función pública en diciembre del 2010 (
Los Andes – 28/12/2010).
Pero...., saben de minería?
OIKOS opina sobre minería, se opone a los proyectos, y debemos suponer que lo hace desde el conocimiento. Su vocero y titular, Eduardo Sosa, si bien muy prudente al tocar temas técnicos, adolece de serias falencias en los económicos, como vimos en
“OIKOS presiona a los legisladores mendocinos”. Analicemos tres casos de lo poco que nos explica sobre minería:
- La lixiviación que genera cavas???: “El método de lixiviación con cianuro genera grandes cavas, extrayendo y emitiendo una serie de sustancias tóxicas” (
Los Andes – 17/06/2007).
El término CAVA, no se utiliza en minería, pero podemos imaginar que se refiere a
“cueva u hoyo”, según la
RAE y posiblemente sea la mala traducción hecha por un ignorante en minería. En la lixiviación con cianuro, tanto a cielo abierto como en tanques, no se producen hoyos, ni se emiten sustancias tóxicas, pues se trabaja en circuitos cerrado y el cianuro es reciclado o destruido.
Puede ser que la gente de Greenpeace y el resto de los repetidores, quieran decir que “la explotación de minerales a cielo abierto genera grandes pozos”, canteras u open pits, en lenguaje apropiado. Es cierto, la explotación de minerales y rocas a cielo abierto deja pozos desde hace miles de años, desde las canteras de griegos, egipcios, aztecas y mayas, de donde extrajeron las rocas para construir sus monumentos, hasta la actualidad con la mayoría de las explotaciones de rocas, minerales industriales y metales, que se hacen a cielo abierto y con los que construimos nuestra civilización. No es la lixiviación con cianuro, es la minería......
- Cianuro prohibido en Europa???: En la nota
“Controversias con la ley de Glaciares en el Congreso” afirma:
“el Parlamento europeo prohibió el 27 de mayo y casi por unanimidad la utilización de cianuro en la minería a cielo abierto”. Dato totalmente falso, hasta en la fecha. Como ya hemos visto en “
Cianuro, está prohibido en Europa?”, el 5 de mayo del 2010 el Parlamento Europeo: “
Pide a la Comisión que proponga la prohibición completa del uso de las tecnologías mineras a base de cianuro en la Unión”.
Pedido de prohibición que es elevado a la Comisión Europea para su estudio técnico, que el 23 de junio, resuelve: “Después de un análisis en profundidad de la cuestión, la Comisión considera que una prohibición general de cianuro en la actividad minera no se justifica desde el punto del medio ambiente y la salud.”............, cerrando el tema.
Aparte del error en la fecha, confunde prohibir con solicitar se “proponga la prohibición”, y además, en ningún lugar del texto de la resolución se menciona “minería a cielo abierto”.
- Los camiones con mercurio???: En la nota del Diario Los Andes,
“¿Es posible un desarrollo minero?” (
Los Andes – 16/10/2005) declara:
“....pensemos solamente en la posibilidad de que en nuestras calles circulen cada día decenas de camiones con sustancias peligrosas como el cianuro o el mercurio.”
Sosa parece ignorar que el mercurio no se utiliza en la recuperación industrial de oro. Debe tomar esa información del Manual de la Internacional Antiminera y de la monografía de Greenpeace. Aparentemente todo su conocimiento sobre la minería se reduce a información recopilada por organizaciones antimineras, sin mayor sustento técnico ni calidad científica.
De todos modos, en las calles de Mendoza, están circulando cargas de sales de cianuro, que abastecen a las galvanoplástias y fábricas de plásticos del gran Mendoza, sales que también venden los proveedores de la industria vitivinícola (Estabifer, etc.). Aparentemente, esas sales de cianuro no están en el campo de preocupación de OIKOS.
Si no saben, por qué se meten?
Lo grave no es que no sepan, sino que encima intenten explicar, y que haya gente que les crea, algunos incautos por desconocimiento, por ser víctimas de su “juicio de autoridad” emanado desde una fundación o claustro universitario, y otros por estar embarcados en una cruzada de promoción del subdesarrollo y la pobreza.
Hablar sin saber, falsear información, ocultar datos, explotar los prejuicios ideológicos, parecen ser sólo herramientas tras un objetivo. Algo que si conocen bien es la forma de trabar, frenar e impedir, mediante acciones judiciales.
Acciones judiciales que abren la puerta a prácticas extorsivas, y que son muy útiles para posicionarse en el competitivo mundo de las ONGs ambientalistas.