Uno de los clásicos mitos antimineros afirma que la minería deja “tierra arrasada”, habla de pasivos ambientales de otras épocas y lugares, como si fueran consecuencia inevitable de la minería moderna. Incluso mencionan inexistentes estadísticas de temibles enfermedades, sembrando el temor en la población.
La contaminación en Sierra Pintada: un dogma de fe antiminera?
La Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) ha hecho mediciones en el Complejo Minero Fabril San Rafael (Sierra Pintada) a lo largo de 10 años (1998-2007), encontrando concentraciones de uranio en agua hasta 50 veces, y radio 226, entre 40 y 112 veces inferiores al valor guía fijado por la legislación (leyes N° 24.051 y 24.585). Estos estudios confirman lo ya informado por la CNEA, y la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria (UNCuyo) como veedor independiente por parte de la provincia de Mendoza (Los Andes, 03/04/2009): los residuos de la explotación en Sierra Pintada, no contaminan.
Los pasivos ambientales...
El concepto de “desarrollo sustentable” data de 1987, pero no fue hasta 1989, con el desastre del Exxon Valdez que sociedad, gobiernos y empresas tomaron conciencia de la importancia de preservar el medio ambiente. Hasta ese entonces, y más aún, en la primera mitad del siglo XX, la minería, al igual que muchas otras industrias generaron pasivos ambientales. Más avanzado el siglo, los pasivos son patrimonio casi exclusivo de la minería artesanal y de los regímenes socialistas.
Europa del Este, una bomba de tiempo
“El derrame tóxico de Hungría es apenas uno de numerosos desastres ecológicos latentes en Europa Oriental. Minas abandonadas en Rumania descargan aguas contaminadas con metales pesados en los ríos. Una planta química húngara produce más de 100.000 toneladas de sustancias tóxicas al año. La tierra de la región oriental de Eslovaquia está contaminada con sustancias que producen cáncer. ............ Rumania, donde hace diez años se rompió un depósito de desechos en una mina de oro en Baia Mare, al norte, y hubo una pérdida de agua con cianuro que mató toneladas de peces..." (El legado tóxico de Europa Oriental).
El ejemplo de Baia Mare
El 30 de enero del 2000 se rompió un dique de contención en la fundición Aurul de Sasar (Rumanía), donde se trataban los residuos de la vieja mina de oro de Baia Mare.
Aurul era una sociedad mixta, entre Esmeralda Exploration y la estatal Romanian Compania Nationala a Metalelor Pretiosasi si Neferoase (REMIN), establecida en 1992 y que empezó a operar el proyecto en 1999. REMIN explotaba el yacimiento desde principios de los años 60, dejando grandes cantidades de residuos de baja ley de oro y plata. Estas colas, apiladas en el centro de la ciudad restringían el desarrollo urbano, contaminando las aguas superficiales y subterráneas.
El accidente se produjo debido a condiciones meteorológicas extremas (hielo y nieve), que provocaron el desborde y rotura del dique de colas. Se estima un derrame de 100.000 m³ de barro y aguas residuales (con 126 ppm de cianuro) por el río Lapus, un afluente del Somes (Szamos), a través del cual alcanzaron el río Tisza y el curso superior del Danubio, desembocando en el mar Negro.
El 1 de febrero, a orillas del Somes, la concentración máxima de cianuro era de 7,8 ppm (límite máximo de 0,01 ppm en aguas superficiales). No hubo víctimas humanas, si en cambio, severos daños en el fitoplancton, zooplancton y gran cantidad de peces muertos. El vertido tuvo lugar en una zona ya contaminada con metales pesados tras una larga historia de explotación minera y tratamiento de metales. Sin embargo, y a pesar de la gravedad del accidente, las autoridades rumanas estimaron que la cantidad de peces muertos fue muy pequeña, y el fitoplancton y zooplancton en el río Somes “se regenera en 16 días a la proporción de 60%”, optimismo no compartido por la autoridades húngaras ni de la ex Yugoslavia.
La misión de la Unidad Ambiental de la ONU (UNEP/OCHA) concluye que el accidente fue el resultado de la ineficacia de los procedimientos de autorización e inspección, permitiendo la construcción de la presa con defectos de diseño. Para iniciar las operaciones, fue necesario obtener veintidós permisos distintos relacionados con el medio ambiente y salud pública, proceso que duró cerca de siete años. La desorganización administrativa, la falta de coordinación eficaz entre los distintos organismos que participaron en la concesión de permisos, y la ausencia de una entidad única dotada de facultades reguladoras y de supervisión técnica, son los principales responsables, según el organismo.
Minería artesanal
Tan sólo un ejemplo reciente: Más de 400 niños han resultado muertos y otras 500 personas han tenido que ser hospitalizadas en los últimos doce meses debido a intoxicación por plomo y mercurio en las zonas donde existen explotaciones de oro artesanales en el norte de Nigeria (Lagos, Nigeria - 06/03/2011). No sólo un pasivo ambiental, un desastre humanitario.
La minería cubana
Artesanal: “Al norte de la ciudad de Holguín, entre esta ciudad y Banes hay una verdadera “invasión de garimpeiros” que se dedican a extraer el oro concentrado en placeres con gran afectación del medio ambiente, principalmente de la capa vegetal que es removida y lavada, lo cual ha ocurrido en plantaciones de la caña de azúcar, desmontadas por plantones, afectando las pocas corrientes y embalses de agua presentes en la zona producto del acarreo de gran cantidad de sedimentos” (LA MINERÍA EN LA CUBA ACTUAL).
Estatal: El municipio minero de Moa, ubicado en la provincia de Holguín, cuenta con dos fábricas de níquel y otras industrias que emiten gran cantidad de gases, desechos tóxicos y residuales que han dañado peligrosamente el medio ambiente. A la disminución de los bosques por la explotación minera se suma el daño a la fauna marina y los gases producidos por la planta cubano-canadiense Pedro Soto Alba y por la cubana Ernesto Guevara. Estas plantas producen un total de 50 mil toneladas de níquel anualmente (CONFERENCIA ANUAL DE LA ASCE).
Pasivos de otros tiempos, de otros lugares......
Pasivos provocados por la minería artesanal, o por atraso tecnológico e ineficiencia administrativa, producto de muchos años de regímenes burocráticos; sistemas en que el Estado produce y se controla a sí mismo, donde la participación ciudadana y hasta la libertad de opinión son inexistentes, menos aún la acción de ONGs.
Lo único que falta es que nos pongan a Norilsk (imágenes) como ejemplo de contaminación minera...no son pasivos mineros, son pasivos del socialismo real y de la pobreza.